Una simple mortal como yo, que carece de transporte propio, no auto, no moto, no bici, no monopatín, no rollers, no patineta (nada), esta obligada a utilizar el trasporte publico, tren, colectivo, subte. Ciertas veces tengo el privilegio de que algún alma caritativa me alcance hasta mi casa en las altas horas de la noche, ya que mi bolsillo se cierra cual capullo cuando la palabra taxi osa salir de mi boca.
Todos aquellos en mi misma situación, saben que el transporte público puede llegar a ser un recorrido de turismo aventura, dependiendo mucho de la zona por la que vaya el trasporte, la hora, el día, etc.
Mi transporte menos preferido es el subte. Si, lo se, es rápido, no da vueltas, en 20 minutos podes estar de un punto de la ciudad a otro, sin tener que sufrir el caos del transito, los bocinazos al aire (aquí quiero hacer un paréntesis por lo siguiente: alguien en su sano juicio y con auto me puede explicar porque corno los autos tocan bocinazos al aire en medio de un embotellamiento? O sea, hay una cola de 15 kilómetros, un embotellamiento de 50 minutos, el transito esta parado porque hubo un accidente o por tareas de reparación de calzada o porque algún boludo se colgó a ver un accidente de la mano contraria, lo que sea, los autos no se mueven, y los idiotas de los autos tocan sus mágicas bocinas como si con eso bastara para que todo vuelva a ser fluido… por favor, que alguien les haga entender que eso no va a pasar!!!), pero el subte me parece total y absolutamente claustrofóbico. Siento que no puedo respirar, que todo el amontonamiento y el calor se triplica, siento el olor a encierro, en realidad todo tipo de olores. Si tengo que elegir entre tomarme un colectivo o el subte, siempre elijo el colectivo, porque hay luz, hay viento y no me siento encerrada.
El colectivo es uno de mis transportes favoritos. Aun en invierno abro la ventanilla para que me de el aire en la cara y si llueve, aun mejor. No me importa el trafico (excepto cuando estoy llegando tarde a un lugar), no me importan la gente que se queja, los problemas, yo en el colectivo soy feliz.
Luego tenemos al tren, que para mi es la versión mejorada del subte. Si, ya lo se, los trenes estaban antes que los subtes, pero según mi punto de vista, cuando crearon los subtes, lo único que hicieron, fue degradar al pobre tren. Los tranvías eran aun mejores que los trenes y que los colectivos, pero se imaginan un tranvía por la avenida Santa Fe o Rivadavia no pudiendo pasar porque los grosos de los tacheros o los colectiveros hacen lo que se les canta? Una lástima lo de los tranvías, no contaminaban, era sencillos, lindos, tenían paradas asignadas.
Hay ciertas cosas que no cambian en el transporte público, y una de ellas es la gente que los usa.
Es sabido y conocido el tema de los asientos. A que me refiero? Se sabe que en todos los trasportes públicos hay asientos asignados para todas aquellas personas que tienen dificultades con la movilidad, embarazadas, discapacitados, niños menores (y cuando me refiero a menores, me refiero a las pequeñas creaturas que no pueden mantener el equilibrio tan bien como un adulto, y no a esos niños que tienen 12 años y los padres – unas joyitas de personas, eh – los suben en los brazos para poder sentarse. Vamos señora, el pibe ya fuma y Ud. lo sube a upa suyo para poder robarle el asiento a una persona educada? Que desfachatez!), y por ultimo, dejo a los mayores, la 3° edad, los viejos, los ancianos y a una clase que parece propagarse con una velocidad increíble: Los viejos/as de mierda. Si, esa especie aborrecible de gente que para lo único que sale a la calle es para mortificar a los demás seres humanos. Esa especie cual única meta es cagarle la vida a los demás. Los viejos/as de mierda abundan en todos lados (el otro día un viejo de mierda le tiro a una de las cajeras 3 pesos en monedas en la cara al grito de “Pelotuda de mierda te dije que no quería monedas!”), en los supermercados, en la cola del banco, por la calle, en los consultorios de los médicos y en los transportes públicos. Los viejos de mierdas de los transportes públicos son una raza verdaderamente asquerosa. Antes de proseguir quiero aclarar que amo a la gente mayor. Si la persona es simpática, agradable y amable, puedo a llegar a hablar horas. Es mas, lo hago en las colas de los bancos, cuando me paso una hora o mas esperando que me den 10 pesos en monedas de 10 centavos. Pero los viejos de mierda, a esos no los soporto.
Los viejos de mierda de los transportes públicos son aquellos que comienzan en la fila de la parada. Llegan, como si vos fueras menos que ellos, y se colan en la fila. Van derecho al comienzo, sin importale quienes son los primeros o el orden. Nunca un “Permiso” un “por favor” un “Gracias”, no, es TU deber dejarlos pasar, y agarrate bien fuerte si les decís algo! Luego de la colada extrema, el viejo de mierda se sube al colectivo, y en vez de sacar las monedas antes, empieza a buscarlas en el momento, arriba del colectivo, quejándose, gritando y rememorando los tiempos donde el colectivero te sacaba el boleto con un billete de 2 pesos: Sr., Sra., eso era en los 90, ya cambiamos, evolucionamos, ahora las trompas de los colectivos son planas! No grite por algo que no va a cambiar! Luego del inconveniente de las monedas y el boleto, el viejo de mierda quiere sentarse. Sabemos por experiencia que los asientos están adelante, por eso, yo, como buena samaritana que soy, elijo sentarme al fondo. Bien al fondo. Cosa que nadie me quite el asiento. Pero los viejos de mierda no se contentan con tener un lugar asignado. Quieren mas, mucho mas. Quieren todo. Por eso van al fondo, a los lugares donde la gente que no quiere ser molestada esta. Los viejos de mierda se te paran al lado y te miran, te clavan la mirada, no dejan de mirarte. Y bufan. Y se quejan. Y te dan lecciones sobre la moral y las buenas costumbres en un colectivo. Hablan bien fuerte sobre los valores de los jóvenes, y como no ayudamos a los pobres viejos: Sra., Sr., querido viejo de mierda, los asientos para Ud., están adelante, vaya a despertar al cuarentón que se hizo el dormido cuando vio que delante de la fila estaba Ud., y hágame el favor y no me rompa las pelotas.
Sra pituca, no me venga a pedir el asiento porque es vieja… si Ud esta usando tacos altos no es mi culpa. Y hágame el favor de no quejarse porque hay mucha gente… este es un trasporte publico, si quiere viajar comoda vaya en taxi o contrate una combi. Cómprese un perro y déjeme de joder
Los viejos de mierda no entienden que hay personas además de ellos. La condición de ser personas mayores no los habilita para tratar mal a los demás.
Elvira Pone Los Fideos 