La palabra duelo se asocia indefectiblemente a la muerte. La palabra muerte se asocia a alguien que se murió, que no está más, que dejó de respirar. Pero no es tan así.
Es verdad que duelo es velar algo que no está más, pero no siempre es la muerte física de alguien. Hacemos duelo por tantas cosas todo el tiempo, que a veces no nos damos cuenta.
Hacemos el duelo por aquella botella de vodka o whisky importado que una vez compramos (cuando estaba el uno a uno y viviamos la vida loca…) y que ya no tenemos más. Hacemos el duelo por ese kilo de más que ganamos cuando comimos en burguer (que cosa… Un duelo por ganar algo). Hacemos duelos porque se fue el bondi qué esperamos por horas. Hacemos duelo por el lavarropas que dijo basta. Hacemos duelos por cosas que no funcionaron.
Cuando las cosas no funcionan se mueren. A nivel metafórico y literal. Cuando algo deja de andar o avanzar, tenemos que aceptar que lamentablemente se termino. Terminó de dar resultados y hay que dejarlo de lado para comprar uno nuevo o para empezar de cero.
Mi vida esta plagada de duelos. En realidad la de todos, pero yo solo puedo hablar por mi, por mis batallas muertas, pérdidas o inútiles. Los duelos por etapas cerradas, duelos por escrituras inconclusas, por proyectos frustrados o truncados, por relaciones o por muertes literales.
Quizás es un cliché. Quizás soy la típica pelotuda que anda por ahí analizando todo (años de terapia no fueron en vano), quizás soy la cuestionadora eterna o quizás solamente es hora de empezar mi duelo postergado.
Duelo por aceptar que no todos piensan o actúan como yo. Duelo por comprender que cuando digo negro, no tengo que aceptar un blanco. Y duelo sobretodo por sintetizar lo que quise.
Quizás no lo sepan, quizás no se enteren, pero estoy haciendo ese duelo. Estoy en la etapa de llorar lo que no fue, en la etapa de aceptación, en la etapa donde mi cerebro le ganó a los sentimientos. Esta buena esa etapa, pero al mismo tiempo es una cagada. Es una cagada porque duele como los mil demonios (no tengo acaso un lenguaje increíble?). Pero esta buena esta etapa, porque es liberadora. Me estoy sacando de encima lo que no sirve para hacer lugar para vaya a saber uno. Como en los celulares o las PCs. Borrar para guardar cosas nuevas. Y si no vienen cosas nuevas, que por lo menos lo viejo no me llene de virus.